miércoles, 13 de marzo de 2013

Al principio...


Comenzó por dibujar la liberación,
la ventana se abrió de par en par,
disparando el pestillo.

Carbón amenazaba el marfil del cielo,
las nubes desfilaban, elefantes
huyendo de un único diente afilado.
Los pájaros miraron absortos,
cómo una mano invisible de soplidos
hacía que las bisagras gruñesen furiosas.

La creatividad del ilustrador
hacía desgañitarse violentamente
cada trazado de viento.
A golpe de grafito,
hizo un dios humano
la primera viñeta de este libro.

No hay comentarios:

Publicar un comentario